Que feo se siente cuando todo pasa a ser segundo plano, hasta uno mismo.
Que feo se siente cuando no te sentís cómoda con lo que sos y tenes que controlarte día a día para no caer en la perdición.
Que feo se siente cuando te pones a pensar que en aquellos tiempos todo era tan fácil, tan manejable, y que sin importar nada, que aunque pasara lo que pasara, era feliz.
Que feo se siente el ver como una de las cosas más importantes de mi vida se me escapa poco a poco, que me abandona, va, ensi, que lo estoy dejando ir.
Que feo se siente pensar que nadie te escucha, que tengo que guardar todos mis sentimientos para ser más fuerte, o simplemente para no poner mal a la gente que quiero, y tener que tener todo esto guardado que no sabes cuando pueda llegar a explotar.
Odio sentirme así, mismo odio sentirme tan cansada, de seguir con esta alergia que me desespera, las pastillas que me matan al igual que las inyecciones, que me sacan energías y me tiran tan abajo que no me dejan hacer todo lo que quiero.
Ya no aguanto.
